Este es un post invitado de Marcos de Emowe, un blog dedicado a ayudar a los padres y profesionales a conocer más sobre el aprendizaje y las técnicas para aprender a estudiar. Es una inmensa satisfacción que haya aceptado colaborar con nosotros porque sin duda sus artículos nos aportan a las familias y docentes mucha información de gran valor. Sin más os dejo con su artículo de cómo el dibujo ayuda a desarrollar la inteligencia de nuestros hijos.
Visual thinking o pensamiento visual es la técnica centrada en enseñarnos a pensar en imágenes o visualmente. Según los estudios de Linda Kreger menos de un 30% de la población emplea el pensamiento visual espacial, otro 45% usa el anterior combinado con el pensamiento tradicional mediante palabras y el resto 25% sólo piensa mediante palabras. Resumiendo un gran porcentaje de la población piensa visualmente.
A los niños les encanta dibujar, con independencia del resultado del dibujo. Ellos son felices plasmando sus pensamientos en un papel y coloreando. No están preocupados por el que dirán, o si el dibujo es lo suficientemente perfecto como para hacerlo público al mundo. No tienen prejuicios, ni barreras mentales cuando dibujan. Les sale de dentro. Por eso hay que incentivarles con técnicas como el visual thinking o pensamiento visual metodologías o técnicas que consisten en trasladar tus pensamientos o ideas en imágenes captando en las mismas la esencia del mensaje a transmitir.
Los niños piensan en imágenes, en movimiento porque no conocen otra cosa. Ignoran lo que son palabras o textos. Sin embargo, con el paso del tiempo y mientras avanzan en los cursos, se les va forzando a desarrollar sus trabajos, expresividad y creatividad a través de las palabras.
Las palabras son necesarias en la comunicación, sintetizan mucho conocimiento en pocos caracteres, si escribimos, o fonemas en el caso que hablemos. Pero las palabras pueden llegar a ser limitantes en el aprendizaje porque incorporamos un elemento adicional en el canal que puede llegar a ser más distorsionador que una imagen, al ser menos representativo de la realidad y abstracta.
Estamos rodeados de palabras, la mayor parte de la información en la escuela, institutos y universidades se nos enseña a través de palabras, de textos, flujos de información lineales. Sin embargo nuestro cerebro no es secuencial, es multizonal, activa varias zonas de trabajo al mismo tiempo que luego interconecta.
El niño que no sepa pensar en palabras quedar rezagado del resto porque la formación y el aprendizaje se realiza mayoritariamente a través de éste medio. Tanto es así, que nuestro pensamiento se acaba moldeando para que sólo trabaje a través de palabras. Perdiendo destreza y creatividad en el dibujo.
Es cierto que, al final, somos capaces de absorber largas tiras de palabras enlazadas entre ellas, pero esto tiene un sobrecoste intelectual o cansancio mental que provoca despistes o desinterés, incluso a un fracaso escolar.
Más vale una imagen que mil palabras
Aunque el hecho de dibujar o tomar notas visuales puede ser más costoso en cuanto a tiempo, por el número de trazos que conlleva, es cierto que la creatividad que libera y la alta retención en la memoria de los dibujos compensa la inversión.
Tenemos que incentivar a nuestros hijos a que dibujen más, a expresarse dibujando, a que aprendan a coger los trazos y la esencia de cada elemento.
Si al niño le gusta dibujar, es una muy buena señal. Es motivo de celebración, de estar en el camino adecuado para un correcto aprendizaje en el futuro.
La afición por el dibujo es un magnífico indicador de que le gusta explorar, representar, características propias e inconfundibles del aprendizaje.
A los niños hay que dejarles espacio para su creatividad, sin embargo con la escritura se les acota. Los dibujos son más expresivos que las palabras. Por ejemplo, a través de los dibujos se pueden detectar algunas características. Como problemas psicológicos o emocionales. Mediante el trazo, si es sin control y variable, podemos atrevernos a adivinar con alto porcentaje de acierto si es un niño débil emocionalmente o muy impulsivo. Incluso si abusa de determinados colores puede ser un indicador de problemas de afecto.
Estas características son empíricas, basadas en estadísticas, no son fiables pero pueden ser sÌntomas a vigilar si los apreciamos.
Cómo pensar visualmente ayuda a resolver problemas
La teoría está muy bien pero vamos a comprobarlo por nosotros mismos a través de estos retos o acertijos.
Problema visual del caracol
Un caracol decide subir a un árbol de 15 metros de altura. Durante el día sube 5 metros pero mientras duerme por la noche, resbala y baja 4 metros.
¿Cuándo llegará a la cima del árbol?
La respuesta un poco más abajo.
Series de números en el parking
Para ver las barreras mentales que tenemos los adultos, intentad realizar este acertijo.
¿En qué número de plaza de parking está aparcado el coche?
Una pista, y no es por meter presión, pero en China niños de Primaria lo resolvieron en menos de 20 segundos.
Otra pista, piensa visualmente, como si fueras dentro del coche a aparcar.
Ya no hay más pistas.
Aviso: No sigas leyendo si todavía no lo has resuelto porque a continuación doy la respuesta
Solución al problema del caracol
Tarda 11 días y 10 noches, llega a la cima el undécimo día. Si lo resolvemos con palabras, nuestra respuesta típica serían 15 días porque al finalizar cada día y noche ha subido un metro. Pero si lo visualizamos, nos preguntan que cuando llega a la cima, da igual que vuelva a bajar de nuevo por la noche. Cuando llega a la cima es el undécimo día que llega a los 15 metros pero baja por la noche y se queda en 11 metros, pero ya ha llegado.
Solución al problema del parking
Si os habéis confundido o habéis tardado en resolverlo, no os preocupéis, es normal. Todos estamos viciados y condicionados en nuestro aprendizaje, incluso en nuestra puesta en escena para resolver un problema. Si todavía no lo habéis resuelto, mirad la imagen al revés y veréis que la serie de números es otra mucho más sencilla. La serie la estábamos viendo desde el punto de vista equivocado, veíamos otros números en nuestro cerebro que como coincidían con nuestros patrones alejaban esta idea.
Lo curioso del asunto es, lo comentado anteriormente, que se trata de un problema que resuelven mejor los niños que los adultos. La razón es porque el pensamiento de los niños está menos condicionado por las reglas que suelen utilizarse para resolver las series matemáticas. Tienen un cerebro moldeable.
Porque nos hemos ofuscado, es sencillo, cuando vemos un acertijo sobre rellenar o continuar una serie, en nuestra mente tenemos distintos patrones que repasamos. Desde el que va de aplicar una operación al número precedente para calcular al siguiente, aplicar una serie numérica previamente conocida, etc, pero nos cuesta pensar que la estemos viendo al revés. Algo que para un niño es simple. Cuando aparcamos estamos mirando el parking desde el otro sentido, no desde el lado que está realizado el dibujo, no estamos pensando visualmente.
Resumen
En el paso del niño a adulto dejamos de pensar visualmente, empezamos a pensar en palabras, las cuales son conceptos abstractos que nos dificultan el aprendizaje. En nuestro afán por la lectura, el estudio, no debemos dejar que pierdan esta capacidad de imaginar, de recrear visualmente composiciones imaginarias. Es una poderosa habilidad que debemos intentar mantener constante y desarrollar en nuestros niños. Déjales que se expresen mediante dibujos, que hagan sus resúmenes gráficos de cualquier acontecimiento o actividad. Mediante los dibujos desarrollan su inteligencia lógica, espacial, incluso emocional, al expresar los sentimientos con los colores, posturas y facciones en las caras. Es una técnica o actividad muy completa que debemos incorporar en la educación de nuestros niños.
Marcos de www.emowe.com
¡Te leo en los comentarios!
Hola, el placer es mío colaborar aquí.
Espero que sea de utilidad para tus lectores. Los dibujos transmiten mucho de nuestros niños y es una pena que se pierda la ilusión por dibujar o representar visualmente los conceptos a medida que nos vamos haciendo adultos.
Muchas gracias por dejarme participar y tu generosidad.
Un abrazo
Tiene razón, llevamos camino de repetir los mismos errores con nuestros hijos. Llevo un tiempo dibujando con mis hijos o enseñandoles conceptos mientras dibujo y he notado que su atención aumenta. En vez de decirles vamos a hacer deberes, les digo vamos a dibujar la lección de hoy y vienen encantados.
Me ha venido genial este post para reafirmar lo que estoy notando.
¡Felicidades Marcos por el artículo y a Malena por el fichaje!
Me ha parecido una entrada muy interesante y me ha hecho recordar una reflexión que ya hace tiempo leí en el siguiente blog y que me gustaría compartir puesto que está relacionado:
http://masideas-menoscuentas.com/2012/08/01/no-entienden-el-problema/
Resolución de problemas matemáticos por alumnos de primaria en Holanda, como no mediante dibujos.
Espero que os guste.
Enhorabuena, mi hijo va a empezar 3 d infantil y lee muy bien tanto en mayúsculas como en minusculas,se le nota q tiene interés. Con el cálculo tb muestra interés.
Pero a la hora de dibujar o escribir me dice q se cansa, no sé cómo motivarlo porque yo lo q es dibujar…tampoco soy d gran ayuda.
Gracias a Marcos y Malena, me encanta leeros y aplicar vuestros consejos!!
utiliza el lado izquiero de su cerebro,y es convergente porque su hijo sabe de calculo pero al momento de dibujar no usa su lado derecho del cerebro que es divergente, yo soy divergente y se mucho de dibujos y artes pero el problema es que no soy divergente y batallo con matematicas
?¿Què puedo hacer si a mi hijo no le gusta dibujar ni colorear? prácticamente le ruego para que lo haga
¿Como puedo citar este trabajo? Me ha gustado para ponerlo en mi tesis pero quiero dar los creditos respectivos al autor
Hola Diana,
yo lo haría siguiendo lo que se detalla en esta web: «Como poner webgrafía«.
Espero que te sirva para tu tesis 🙂
Saludos.
Hola Diana,
yo utilizaría lo que explican en este artículo.
Espero que te sirva para tu tesis. 🙂
Un abrazo.